La Escritura no explica qué estaba haciendo Benaía ni a dónde iba cuando se cruzó con el león. No sabemos la hora del día ni su estado de ánimo. Pero las Escrituras revelan su reacción, la cual fue de valentía.

La Escritura no explica qué estaba haciendo Benaía ni a dónde iba cuando se cruzó con el león. No sabemos la hora del día ni su estado de ánimo. Pero las Escrituras revelan su reacción, la cual fue de valentía.